El Rayo campeón de la Superliga femenina

Ayer, al salir ayer del metro en la Puerta del Sol, sobre las siete y media de la tarde, había un grupo de personas muy ruidosas delante del edificio de la Comunidad, sobre el kilómetro cero. Primero pensé que era una manifestación de protesta, parecía un grupo organizado, a su lado había un autobús, autobús blanco con una raya roja. Según me acercaba, me pareció que los gritos eran más bien eufóricos. Justo cuando pasaba a su lado, vi salir a las chicas del Rayo entre gritos de campeonas. Caritas resplandecientes de alegría, con esa sonrisa que no se quita. Esperé hasta ver salir a una en concreto: Adriana. ¡Como me escuece verla con otros colores! Alguien tendría que pedir cuentas a la directiva que la dejó escapar. ¿Doña Teresa, también exultante, les ha ganó por la mano a los nuestros?
En cualquier caso, hay que felicitar al Rayo y animar a las pericas. La temporada ha sido extraordinaria. Si hubiera sido una liga normal, parece que el resultado habría sido distinto. ¿Qué se buscaba con esta modalidad? ¿Qué se buscaba con un cara o cruz después de ocho meses de competición? El segundo clasificado no tiene nada que perder y mucho que ganar. El primero todo lo contrario. Ya sé que el play-off no es un invento nuevo, pero esto no ha sido un play-off, ha sido una eliminatoria copera. Ese aire tuvo en Vallecas y ese aire tuvo en Sadrià. Concretamente en el de vuelta, el planteamiento de Rayo fue claro y el Espanyol cayó de lleno en la trampa. Balones largos entre líneas excesivamente separadas que una y otra vez llegaban con ventaja para las vallecanas. Y las nuestras no sólo no cambiaron de planteamiento sino que se empecinaron en lo que no estaba dando resultado. Sólo cabía esperar un golpe de suerte que no llegó. Al final, empate a uno.
Sin duda son los dos mejores equipos de España en estos momentos y tiene mucho mérito porque no son clubs que naden en la abundancia. Me pregunto de dónde viene esa apuesta en el Rayo. ¿Es un empeño personal de su presidenta? Me gustaría que algún rayista nos lo explicase en este foro.
Y ahora vamos a ver como sale el próximo siguiente experimento. Copa con fase final a cuatro, con aire de torneo. El pretexto me da que pueden ser las televisiones. Por cierto, gracias teledeporte por la retransmisión del partido. Puede ser una buena forma de promocionar el futbol femenino, no se si de financiar (no creo que llegue a tanto). Pero mucho cuidado, eso nunca puede condicionar el espíritu de la competición y me temo que no estamos muy lejos de hacerlo.
Para terminar, una vez más: ¡felicidades Rayo!¡ánimo Espanyol!¡Adriana te seguimos queriendo, vuelve cuando quieras!